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miércoles, 5 de mayo de 2010

Me han quitado la ilusión...

Sí, me han quitado la ilusión.
Llevo muchos años, desde que nací, siendo hincha del VCF.
He vivido temporadas en las que solamente con haber ganado en Mestalla al Madrid y/o al Barsa, ya nos conformábamos, aunque quedáramos los séptimos o los octavos.
Y aún así conservaba la ilusión.
Un año, un gol de Tendillo al Madrid, nos libró de bajar a segunda división, aunque fue engordar para morir, ya que, sin aprender la lección, tres temporadas después descendimos.
Y aún así conservaba la ilusión.
Esa temporada en segunda, el VCF batió el record de su número de socios, y encabezó la tabla casi desde el principio, regresando al año siguiente a la primera división.
Y seguía conservando la ilusión.
El VCF se ha pasado muchos años seguidos, incluso décadas, sin conseguir título alguno, pero mi ilusión por nuestro equipo nunca ha fallado.
Nunca, hasta hace cinco o quizá seis años.
Es curioso que eso ocurra inmediatamente después del trienio mas glorioso de la historia del VCF, el de 2002 al 2004.
La marcha de Benítez, el no haber acometido la limpieza de la plantilla, la llegada de Soler, con sus mejores intenciones pero con su nefasta gestión, "ayudado" por la amarillista prensa deportiva valenciana, la absurda, para mí, elección entre Carboni y Quique, culminada con la destitución de este último a las primeras de cambio de la temporada.
La aparición en escena del charlatán Soriano, ese personaje demencial, que intentó por todos los medios lícitos e ilícitos adueñarse del VCF, cuando no estaba capacitado económica ni mentalmente para ello.
Mintió, manipuló, engañó, y acabó haciendo el más espantoso de los ridículos.
El castigo está en la penitencia, y creo que esa aventura le costó gran parte de su patrimonio.
El regreso de Llorente a la presidencia, propiciado por Bancaja, después de habérselo llevado calentito por su anterior despido.
La posterior ampliación de capital, presuntamente fraudulenta, con una Fundación bajo sospecha.
Un inciso: resulta cuanto menos curioso que el antiguo Pamesa, ahora Power Electronics, esté realizando una de sus mejores temporadas después de la salida de su presidente Llorente.
Todo ello sin olvidarnos de episodios esperpénticos como los de Miguel Angel Ruiz, David Albelda, Juan Villalonga...
Tampoco quiero olvidarme de Fernando Gómez Colomer, que ni Soriano ni Llorente lo han tirado, presuntamente, porque tendrían que pagarle íntegro su contrato "blindado".
Llevo mucho tiempo convencido de que nadie, salvo la afición, quiere de corazón a este club, que está en manos de depredadores.
La vergonzosa prensa deportiva, salvo mínimas excepciones, solo está interesada en sus propios beneficios, y no se cansa de manipular y de mentir.
Ahora, conseguida matemáticamente la clasificación para champions, y casi asegurado el tercer puesto en la liga, a 25 puntos del primero, me parece surrealista que se estén planteando la renovación de Emery.
Si el Sevilla y/o el Atlético y/o el Villareal hubieran estado a la altura de temporadas anteriores, aún estaríamos luchando por conseguir un puesto entre los cuatro primeros hasta el final.
Como os puedo asegurar que hay muchas cosas en la vida más importantes que el fútbol, he decidido que si se renueva a Emery, y todo parece indicar que va a ser así, el que suscribe no va a renovar el pase que este año solo ha utilizado en una ocasión.
Pienso que, si me apetece en el futuro, cuando inauguren el nuevo estadio, si es que lo llegan a terminar alguna vez, habrán pases de sobra.
Es más, si el año que viene, a alguien se le ocurre renovar al patriota, yo seguiré sin ir al fútbol.
Me parecería vergonzoso que a Baraja se le despida sin más, con todo lo que le debemos, y el pesetero Albelda siga un solo año más del que le queda de contrato.
En fin, no voy a seguir, aunque podría hacerlo, y me quedo muy tranquilo sabiendo que ni un euro de mi bolsillo servirá para alimentar a nadie de esta pandilla de vividores que se aprovechan del Valencia, c.f.

lunes, 26 de enero de 2009

Fernando, el manso (II) o la vuelta a las andadas

El partido de ayer, así como los acontecimientos que lo precedieron, viene a demostrar que las heridas que se cierran en falso, como bien saben todos los que se dedican a la sanidad, no están curadas, y, tarde o temprano, vuelven a infectarse.

Los albeldistas deberían darse cuenta, ya que prefieren ser de un jugador antes que del VCF, que su postura está sirviendo para que un individuo, que siempre ha antepuesto egoistamente su interés personal al interés del club que le paga, haya terminado creyéndose el amo del club.

Este jugador ya se cree con derecho a decirle a Unai con que jugador debe cubrir determinada posición, e incluso, decidir cuando debe y cuando no debe jugar el mismo.

Antes que nada, y para salir al paso de todo aquel que pretenda ensalzar y pregonar el presunto valencianismo y la implicación del "gran capitán", recordaré que a este jugador lo han querido sacar del equipo y del club, con mas o menos fuerza, todos los entrenadores desde Benítez hasta Koeman, pasando por Ranieri (segunda etapa) y QSF (al final). Por algo será.

Además, al termino de cada una de las dos primeras temporadas de QSF, o una de Ranieri y otra de QSF, no estoy seguro, tuvo la desfachatez de pedirle a Soler la carta de libertad, por la cara, para fichar por el Barsa, que le ofrecía mas dinero si llegaba libre. Ese es el amor a unos colores, a los colores del dinero, claro. Y todo eso, para el que no prefiera seguir ciego, está documentado, y no tiene mas que tirar de hemeroteca.

En la pretemporada, tanto Juan Sánchez como Unai Emery, tenían claro que lo mejor era que Albelda se buscara equipo, ya que en el VCF no tenía sitio y si no salía no iba a jugar. Eso también está documentado, porque lo publicaron todos los periódicos. Pero entonces se produjo todo el lío de Soler-Villalonga-Soriano, y la llegada a la dirección deportiva de Fernando Gómez Colomer, que, en sus primeras declaraciones, dijo que lo de la denuncia de Albelda no le afectaba, porque había ocurrido antes de que el fuera responsable deportivo del club y que ese jugador era patrimonio del club y que debía jugar, poco menos que por decreto.

Ahora Albelda, envalentonado, vuelve a creerse el amo del vestuario, aunque ya no tiene los apoyos del pasado (Cañizares, Ayala...), pero, claro, piensa que la decisión de Fernando le da patente de corso.

El vestuario está revolucionado, y con razón. Cuando hay jugadores que, por profesionalidad, (¡no hablemos de amor a unos colores, que son profesionales!), dan todo lo que tienen y saben, y se dan cuenta de que otros juegan por decreto, lo hagan mal o regular, y encima deciden cuando juegan y cuando no, se cabrean y dejan de rendir, aunque sea inconscientemente, o por falta de motivación.

Unai está en peligro por falta de carácter y él lo sabe. O toma el mando del vestuario, si Fernando le deja, o no llegará a final de temporada. Si nadie lo remedia volveremos a las andadas del año pasado.

Fernando Gómez Colomer, del que ya denuncié sus tibias quejas por las actuaciones arbitrales, no ha conseguido nada. Nos han vuelto a pitar un penalty inexistente y nos han metido un gol, el primero, en fuera de juego dudoso (dicen que hay una repetición que se ve en línea) pero que al Madrid o al Barsa no se lo hubieran dado en contra (véase el gol que le anulan al Numancia y el primero que le marcan en fuera de juego).

Soriano se dejó tomar el pelo por Sánchez Arminio.

En una cosa estoy de acuerdo con Albelda: Esto es Valencia, no nos puede extrañar nada.

Fíjate si esto es Valencia y no nos puede extrañar nada, que tú sigues "jugando" en el Valencia Club de Fútbol.

PD.- Zigic, tres goles, nueve puntos.

lunes, 22 de diciembre de 2008

18 D - El aniversario


Podía haber sido un aniversario gozoso, pero ha acabado siendo un aniversario maldito.

El 18 de diciembre de 2007 se perdió la gran oportunidad de limpiar un vestuario acomodado, formado por varios grupos, alguno de ellos solo preocupado por su propio interés y al que le importaba un pimiento su club.

Desde el último año de Benítez, ya se hizo patente la necesidad de efectuar esa limpieza, y hoy, mas de cuatro años después, solo se ha conseguido mínimamente.

Aquel 18 de diciembre se produjo la peor escisión entre la afición valencianista, con la creación de dos grandes grupos: los albeldistas y los antialbeldistas.

Inicialmente, los albeldistas eran mas, tal vez cegados por lo que ese jugador había sido en el pasado, sin tener en cuenta que el fútbol es presente y futuro y no se puede vivir del pasado, pero a raíz de la presentación de la demanda de Albelda contra el VALENCIA, hubo un continuo transvase de un grupo al otro, a pesar de las constantes intoxicaciones de los medios de comunicación, que, en gran parte estaban contra el VALENCIA en aquel envite.

Hubo, incluso, alguien, que le dijo a Albelda: "Tu denúncialos, que estos se cagan por la pata abajo y te dan todo lo que pidas".

Recuerdo a los desmemoriados que Albelda, lógicamente, perdió el juicio, pero que si lo hubiera ganado, se hubiera marchado con nuestro dinero, a jugar a otro club, posiblemente el Villarreal, pasándose ese valencianismo del que hace gala por el sitio donde la espalda pierde su casto nombre.

Aquella acción de denunciar al VALENCIA convenció a muchos de la mala fe del ex gran capitán, hasta el punto de que se convirtieron en mayoría, pero con la llegada de la nueva directiva, y la decisión de que Albelda se quedara y jugara por decreto, muchos, por lo menos en el campo, le dejaron de silbar, convencidos de que no es bueno silbar a alguien que lleva la camiseta de tu equipo, aunque no lo merezca.

He escuchado cientos de veces a los albeldistas quejarse y decir que ya está bien de hablar del tema, pero en cambio, algunos de ellos no pierden la ocasión para hurgar en la herida en cuanto pueden.

Uno de ellos, nombrado recientemente, no se con qué méritos, y seguro que no por ser valencianista, director de un diario deportivo, se permitió publicar el jueves pasado en un artículo, las siguiente frases, refiriéndose al patriota: "Un año después, y a dos días del Bernabeu, su participación es clave para sostener al segundo clasificado de la Liga" o "Dicen que no es el tiempo el que cura todas las heridas sino el amor, y en ese aspecto ofende cualquier duda sobre el «6», pues sigue siendo uno de los jugadores más comprometidos con sus colores y teniendo el murciélago del escudo por currículum"

Además de ser un hortera, miente.

Os voy a recordar una jugada del partido del pasado sábado en Madrid. Corría el minuto 20 del primer tiempo. El VCF perdía 1 - 0 desde el minuto 3. Se interna por la derecha, creo que Joaquín, y cuando llega al lateral del área contraria centra y el balón se pasea por delante de la portería sin encontrar rematador, porque no había nadie del VCF. Curiosamente, cuando el balón sale del área por la izquierda, aparece Albelda. No llega al balón, aunque no estoy seguro de que lo intentase, y este sale fuera de banda a favor del Madrid, a tres metros del banderín de córner. Entonces yo pensé: ¿qué coño hace Albelda en esa parte del campo, tan lejos de su querida zona 5?. La respuesta me la dio el propio Albelda enseguida. Se agachó, cogió el balón, se lo dio amorosamente en las manos a Guti, que sacó rápidamente, mientras Albelda regresaba andando a su sitio. El balón, después de pasar por el centro del campo, donde debía haber estado Albelda, le llegó en diagonal a Robben que se iba solo hacía nuestra portería y Del Horno le hizo una falta por detrás que le costo una amarilla, que bien pudo ser roja.

Ese mismo día, jueves, a las tres de la tarde, en un programa deportivo local de una cadena nacional, un ¿periodista? al que apodan pimentó, le hizo a Albelda la entrevista mas absurda, manipuladora y vergonzosa que recuerdo en muchos años. No me voy a extender mucho, aunque la entrevista fue bastante larga, pero se dijeron cosas como: "la decisión no fue deportiva", "mi rendimiento era muy bueno", "tu no eras un cáncer en el vestuario, el cáncer eran otros", "ahora no te atacan los medios de Madrid" y, lo mejor de todo, pimentó le preguntó a Albelda si iba a volver a la selección, y este dijo "ahora lo veo difícil, pero no lo descarto en un futuro". En fin, se ve que algunos tienen patente de corso para decir tonterías.

Está claro que, al menos mientras siga la actual directiva, tendremos que apechugar con la situación de Albelda, pero les diría a los albeldistas que las cosas cuanto mas se remueven mas huelen, y que la herida sigue abierta y puede volver a sangrar en cualquier momento, así que dejémonos de tonterías y de ser de este o aquel jugador, seamos todos del VCF, y tengamos a un entrenador que saque siempre a los mejores y deje a los acabados en el banquillo o, mejor, fuera del equipo,y, sobre todo, que nadie juegue por decreto.

Ultima hora: "SUPERDEPORTE, (Conrado Valle) como hiciera en un momento de la era Quique y también en la de Koeman, pulsó la opinión de siete expertos futbolísticos (profesionales que hablan desde el anonimato por estar la mayoría en activo) y dice que los aciertos de Robben se debieron, según los técnicos llamados a consulta, a desajustes y errores de Albelda a la hora de hacer la cobertura y de Del Horno en el marcaje."

Por cierto, no me ha tocado la lotería. Salud que tengamos...