El contrato Mediapró

El contrato con Mediapró no soluciona nada.

Sí, se ha firmado un gran contrato de televisión, el mejor jamás firmado por el VCF, pero eso no soluciona nada.
A menos que Soriano, en su peregrinación por los bancos, encuentre alguno que admita ese contrato como aval, cosa prácticamente imposible.
Mediapró no anticipa ninguna cantidad, ni en efectivo ni en pagares avalados, a pesar de que Zorío, en algún momento, ha intentado hacérnoslo creer, mintiendo como acostumbra últimamente.
A los jugadores se les ha dicho que van a cobrar seguro, pero sin comprometerse a plazo alguno.
A la U.T.E. se le va a decir que también van a cobrar, pero sin fijar fecha y se le va a pedir que retomen las obras.
Conclusión, sigue sin haber un duro, pero ya hay una pequeña garantía de que en Junio o Julio se pueden ingresar 48 millones.
Pero claro, el 30 de Junio la deuda no va a ser la de hoy, va a ser mucho mayor. Tanto que los 40 y pico de millones que se cobren ya se quedan cortos. Muy cortos. Y, entonces qué?. Tiramos mano de los siguientes 48 millones de la temporada 2010-2011?. Imposible, o, cuanto menos, muy difícil.
Yo estoy convencido de que la solución no pasa por la mano de los actuales gestores, que no dueños, del VCF.
Cuanto más tiempo tarde en dimitir la directiva completa de Soriano, más difícil será reconducir la situación creada. Creada por quien sea, eso ahora es lo que menos importa, y si eso le importa a alguien, a ese alguien no le importa el VCF, le importa la carroña.
Por menos de lo que está pasando ahora, hemos tirado a presidentes con más fuerza y mas personalidad que el actual.
Los aficionados hemos llegado a un punto de pasotismo indignante. La expresión "ni sentir ni padecer" cobra fuerza día a día.
Hemos dejado de ir al campo hastiados, cansados de que a unos "profesionales" se la sude los sentimientos de una afición.
Nosotros somos esa afición y tenemos lo que nos merecemos.
Los sucesos de la temporada pasada nos dieron la posibilidad de solucionar los males deportivos que el VCF viene arrastrando desde el año 2004. En vez de eso, la afición se dividió en dos grandes bloques, los pro y los anti, en lugar de unirnos todos en un gran bloque, el valencianista.
Los jugadores con amor a los colores no existen, o son una rara excepción, y desde luego en el VCF actual no creo que haya ninguno.
Ellos son profesionales y defienden sus intereses, pero esa misma profesionalidad debería hacerles rendir al 100%, a nivel de jugadores de Champions, y no de dieciseisavos de Uefa, como ahora.